Buenos consejos para contrarrestar un mal ambiente de trabajo.
Seguro que te ha pasado alguna vez,
trabajar en un sitio donde no estás a gusto aunque te encante lo que haces.
Quizá tus compañeros, tu jefe o el lugar en sí son agobiantes, negativos y te
sientes mal cada vez que vas a trabajar. Hasta el punto de que ya no sabes qué
hacer para salir de esa situación.
Tranquila, no estás sola.
Esta
situación genera mucho estrés y ansiedad, y te afecta no sólo profesionalmente
sino también en otras áreas de tu vida. Lo ideal es cambiar cuanto antes, salir
corriendo de ese tipo de ambiente. Pero sé que hay veces que prefieres aguantar
a perder tu trabajo porque simplemente no te lo puedes permitir (pero por
favor, sal de ahí en cuanto puedas, no tienes por qué pasar al menos ocho horas
al día así!). Si ese es tu caso y realmente no puedes dejar el trabajo,
entonces por lo menos intenta hacerlo más soportable. Estas son algunas cosas
que puedes hacer:
1. Aléjate de la gente negativa que
siempre está quejándose o criticando, estarás más tranquila. Por supuesto hay
veces que no podrás, pero haz todo lo posible porque estas personas son los
típicos vampiros emocionales que te dejan exhausta.
2. Crea un sitio de trabajo
personalizado y relajante (con fotos, flores, etc.). Así te sentirás a gusto al
menos en ese espacio. Puedes también escuchar música o aislarte un poco con los
auriculares.
3. Haz bien tu trabajo. Ya lo he dicho
otras veces cuando trabajas a fondo y haces las cosas lo mejor que puedes te
sientes muy bien.
4. Mantente ocupada. Si haces bien tu
trabajo lo harás, porque si a la insatisfacción le unes la apatía, el
aburrimiento y la desgana, no llegarás muy lejos.
5. Piensa si hay algo que tú puedas
hacer para mejorar la situación. No sea que te estés quejando y en el fondo tú
puedas hacer algo al respecto. Quizá si te esforzaras por conocer un poco a tus
compañeros el ambiente sería más distendido y agradable, por ejemplo.
6. No te quejes todo el rato. No solo no
solucionarás nada sino que empeorará tu humor y tu percepción de la situación.
No quiero decir que no puedas tener un día malo, sino que no lo conviertas en
algo permanente.
7. Ten un grupo de amigos fuera del
trabajo con los que puedas relajarte y disfrutar. Si, además, tienes alguna
afición, mejor que mejor. Eso te dará energía para afrontar la situación en el
trabajo.
8. Recuerda las ventajas del trabajo.
¿Por qué lo aceptaste?, ¿qué es lo que quieres de ese puesto? ¿Es el sueldo, la
experiencia, vocación? ¿Cuál es el objetivo? Que eso te de fuerzas para seguir.
9. Pon límites. ¡Importantísimo! No
dejes que se aprovechen de ti, o que te interrumpan cada medio minuto o lo que
sea que te pase a ti. Recuerda la importancia de decir no.
10. Soluciona o afronta los conflictos
según se vayan presentando. Primero evita todos los que puedas (especialmente
si alguno de tus compañeros o compañeras es un conflicto viviente), y si te ves
involucrado en alguno trata de solucionarlo lo antes posible para que no se
generen rencores y las consecuencias sean peores.
Obviamente no es fácil y no envidio tu
situación, pero si no quieres o puedes dejar tu trabajo y quieres cambios
tienes que poner de tu parte. Agobiarte, quejarte y seguir sin hacer nada no va
a solucionar o mejorar la situación. Así que si no tiene solución por lo menos
hazla lo más aguantable o aceptable posible. ¿Qué opinas?
Fuente:gestiopolis.com
Me encanto! Gracias.
ResponderEliminarCristely Filpo